NI DOOHAN NI CRIVILLE, PRIMER TRIUNFO DEL ESPAÑOL CARLOS CHECA EN MONTMELÓ
Ni el australiano Michael Doohan ni el español Alex Crivillé, ambos del equipo Honda HRC, a pesar de las expectativas que suscitó su enfrentamiento en el circuito de Montmeló con ocasión del Gran Premio de Cataluña de 500 c.c., consiguieron la victoria, que fue a recaer, por primera vez en su historial deportivo, en el español Carlos Checa (Honda).
Checa hizo una carrera impecable en un circuito que se conoce como la palma de la mano. De salida fue el italiano Luca Cadalora (Honda) quien consiguió ser el más rápido, pero en apenas dos vueltas el piloto del equipo Honda Pons se situó en cabeza y con una precisión casi matemática comenzó a rodar en 1:47 para marcharse de todos sus rivales.
Con una superioridad insultante, Carlos Checa se fue a razón de casi medio segundo por vuelta de todos sus rivales, mientras que Michael Doohan y Alex Crivillé volvían a protagonizar su particular lucha, pero en esta ocasión por la segunda plaza.
Tanto Doohan como Crivillé, como en anteriores grandes premios, lucharon casi de principio a fin por ser el mejor y aunque el español realizó una carrera espectacular y con unos derrapajes de ambas ruedas que ponían los pelos de punta, fue el australiano quien en la última vuelta doblegó a su rival para lograr la segunda plaza y un nuevo título mundial, el tercero de su carrera deportiva.
El japonés Tomomi Manako (Honda) se adjudicó su primera victoria de la temporada de 125 c.c. y se acercó a la lucha por el título mundial, en la que eran ya tres japoneses quienes cuentaban con más opciones.
La carrera de 125 c.c., como resulta ya habitual en cada gran premio, resultó de lo más competida y hasta que el nipón Manako decidió marcharse de sus rivales a razón de un nuevo récord a cada vuelta, después de completarse el decimotercero de los 22 giros que debían dar. Fueron un total de hasta once pilotos los que pugnaron por la victoria final.
Sin embargo, uno de los más serios candidatos al triunfo final, el japonés Masaki Tokudome (Aprilia) y otro de los firmes aspirantes a la victoria en cada gran premio, el italiano Valentino Rossi (Aprilia), se fueron por los suelos en la primera curva del circuito nada más darse la salida.
Un toque entre ambos, al evitar a otro piloto que había ido por delante en la salida, provocó una caída en cadena, en la que los más perjudicados, por sus aspiraciones, fueron estos dos pilotos, en tanto que por delante ya empezaba a formarse el grupo que debía luchar por la victoria en Montmeló.
Dio la impresión de que las últimas vueltas volverían a ser de infarto, pero el japonés Manako tenía un "as" guardado bajo el mono. En la decimotercera vuelta tomó el mando de la carrera, comenzó a imprimir un ritmo más de un segundo más rápido y se marchó de sus rivales, que se obcecaron en exceso en su particular enfrentamiento y cuando se dieron cuenta de que el piloto de Honda se les iba ya era demasiado tarde.
El italiano Massimiliano Biaggi (Aprilia) consigui├│ su octavo triunfo de la temporada y aument├│ su ventaja en la clasificaci├│n general provisional del campeonato del mundo de 250 c.c.
La carrera del cuarto de litro apenas tuvo cuatro vueltas de interés, aquéllas que lideró el francés Oliver Jacque, con el motor Honda para 1997, pero desde el mismo momento en que el romano se puso en cabeza, a pesar de la fuerte oposición que en principio le plantó el francés, se acabó la emoción en ese preciso instante.
Con Biaggi destacado y Jacque en una cómoda segunda plaza, el alemán Ralf Waldmann (Honda), también con la evolución de la marca japonesa para 1997, se conformó con la tercera posición.